La producción de ACS supone el 70% del consumo energético de energía en un hogar. Por lo tanto se debe cuidar desde el punto de vista del ahorro y la eficiencia energética la producción distribución y consumo de ACS.
La tipología es variada según como se distribuya o almacene el ACS. Desde el punto de vista del ahorro energético cabe destacar:
- En la distribución es conveniente contar una recirculación para evitar el despilfarro de energía y agua. Si está lejos el punto de consumo del de producción, más de 15 metros, es importante el ahorro que se obtiene con la recirculación.
- En un sistema con acumulación la potencia térmica una caldera eficiente o productor de energía térmica es menor al existir un tiempo de preparación que hace que la energía quede almacenada para su uso. Si el depósito de almacenamiento se calienta se produce en 3 horas se consigue que la el generador
No calentar en exceso el ACS para evitar después que se mezcle con agua fría. No hay que olvidar que para evitar que se propague la legionella se deben cumplir unos requisitos. Lo recomendable es tener un sistema de control adecuado junto con un mantenimiento preventivo para cumplir con los objetivos de ahorro y salud de manera conjunta.
Nunca olvidar que a mayor temperatura también mayores pérdidas, mas gasto en aislamiento para tuberías y depósitos.
Reduciendo el recorrido de las tuberías se consiguen reducir las pérdidas considerablemente.
Hay que evaluar siempre la cantidad de energía que se pierde en la distribución y compararlos siempre con la potencia instalada.